Hoy hablamos con María Ángeles, una profesional inquieta y apasionada por el mundo de los negocios, pero sobre todo por las personas que lo hacen posible. María Ángeles, notable por su labor en conseguir que las personas se sientan en armonía con lo que hacen en el día a día, nos cuenta qué hay detrás de la felicidad de los empleados, cuáles son los mayores retos de la gestión de personas y cómo conseguir equipos de alto rendimiento, uno de los muchos focos de su carrera profesional.
Comenzó su andadura por empresas de trabajo temporal y se dio cuenta de la importancia de cambiar el sistema tradicional de los recursos humanos. Desde entonces, nunca ha dejado pasar la oportunidad de dar conferencias y cursos a profesionales del sector, y ha trabajado en compañías como Jeff, Tacubaya y actualmente, en BigBuy cómo Chief People Officer.
El secreto está en rodearte de buenas personas y dejar que cada profesional haga lo que mejor sabe hacer.
El mayor reto al que nos enfrentamos los profesionales del sector es el hacer visible el departamento de persona y cultura. Existe la creencia errónea de que cualquier persona podría ser capaz, por ejemplo, de seleccionar buenas personas y, por tanto, se hace realmente difícil posicionar el departamento y sus iniciativas en el grueso del negocio para crear verdaderamente impacto en el éxito de las compañías.
Es todo un reto hacer entender que el depto. de personas es el habilitador, entre otros aspectos, de conseguir mediante la transformación digital que todos los equipos cooperen y compartan el mismo propósito, reduciendo capas de control, agilizando los procesos, dando autonomía y confianza a sus colaboradores. Sólo así se obtiene una organización líquida capaz de usar, por ellos mismos, los recursos para avanzar para lograr el éxito. Un reto que debe ir acompañado sin duda del apoyo del CEO que ya de por sí es otro reto más.
Otro de los mayores retos al que nos enfrentamos es el de posicionar al colaborador en el centro del negocio. Tanto antes como después de este gran cambio, el reto ha sido y será saber fidelizar, cuidar y desarrollar a cada uno de los colaboradores de una empresa adaptándose al contexto en el que vivimos.
“Como dijo el premio Nobel de economía tras el confinamiento por Covid-19: "Para salir ilesos de esta, la clave es retener el know how de la empresa, el talento humano."”
Según mi trayectoria, estos dos grandes retos se consiguen trabajando en "mini-retos" como:
- Comunicación interna: trabajar desde el departamento de personas y cultura la interrelación con todas las áreas de la organización. La comunicación y los mensajes internos compartiendo la filosofía de la empresa.
- Transformación: Es imprescindible saber discernir y valorar los sistemas y procesos con los que cuenta la empresa para saber qué y cómo implantar nuevas iniciativas.
- Estimulación y valoración: es necesario hacer visible el resultado de cada colaborador en el éxito de la empresa. Generando así un compromiso y satisfacción y sentimiento de pertenencia de cada persona con la empresa.
- Seducir al talento: no vale con hacer una selección a la vieja usanza hay que cooperar con otros departamentos como marketing o compras elaborar y diseñar una estrategia de employer branding y una comunicación eficaz, transparente y atractiva que capte la atención de los candidatos.
“Los retos que tenemos por delante afortunadamente son asombrosos y quién apueste por el departamento de personas tiene un porcentaje de éxito asegurado.”
No hay una fórmula mágica que se pueda aplicar a todas las empresas, pero es cierto que existen 4 bases que conllevan a tener un equipo del alto rendimiento, aplicables de manera totalmente diferente a cada tipo de empresa:
1. Elegir a un líder puede parecer fácil pero no lo es. El líder, es el primer motivo por el que más del 50% de los colaboradores dejarían su trabajo y, por ello, es de suma importancia trabajar con los mandos intermedios para que se conviertan en líderes abiertos e integradores, con liderazgo de forma inclusiva, dialogante y con un gran sentido de la cultura corporativa.
2. Tener un equipo de alto rendimiento debe contar con buenas personas seguras de sí mismas. Que saben para qué, porqué y qué deben hacer. Conocen su propósito dentro de la organización, pero lo más importante es que se conocen a sí mismos y están en sintonía con lo que hacen.
3. Ligado a los dos primeros puntos nace el concepto del one to one, o lo que es lo mismo una charla informal con el líder para que ambos se conozcan y consigan un vínculo de confianza que le unirá para conseguir la meta común que se han propuesto. El feedback 360° es importante para un equipo que se plantea conseguir grandes hitos.
4. Generar autonomía, claridad y transparencia en los objetivos de la organización. Una buena definición de los objetivos y tiempos establecidos serán otro de los pilares de un equipo de alto rendimiento.
“Conseguir un equipo de alto rendimiento no es fácil, pero hay 4 aspectos que sí o sí tienen que estar ahí: un buen líder, un equipo seguro de sí mismo, un vínculo de confianza entre ambos, y un sentido de autonomía, claridad y transparencia en la organización.”
Estamos muy cerca de conseguir nuestro propósito y no es porque lo diga yo sino porque preguntes a quien preguntes dentro de la BigFamily estoy convencida que solo te dirán buenas palabras del ambiente, flexibilidad e iniciativas de conciliación como la implantación de jornadas laborales de 4 días, jornada intensiva y teletrabajo entre otras muchas que tenemos para el equipo.
La iniciativa más destacable es poner en el centro del negocio a las personas, desde el equipo hasta los partners y clientes. El secreto está en rodearte del mejor talento que puedas y dejar que cada profesional haga lo que mejor sabe hacer.
Qué nada vale sino hay números que lo avalan. Todo absolutamente todo es medible y la clave, por lo que he aprendido es, 80% datos 20% de experiencia. Porque lo que hoy vale mañana no, pero en cambio los números te ayudan a decantarte por lo que sí.
Pero sobre todo la mayor lección que me ha dado esta trayectoria entre grandes profesionales y compañeros es que hay que estar en armonía con uno mismo para conseguir lo que uno se propone.
María Ángeles nos ofrece una visión llena de ilusión y motivación en cuanto al futuro del departamento de personas. Y, además, nos brinda la oportunidad de aprender, desde su experiencia, como los grandes retos se consiguen trabajando en “mini-retos” que te permitan acercarte a las personas que forman tu organización y la dirigen al éxito.
Recalca la importancia de poner a las personas en el centro, de comunicar, estar abierto al cambio y valorar el trabajo de cada uno de los miembros de la organización. Sin embargo, nosotros nos quedamos con una gran enseñanza: “Hay que estar en armonía con uno mismo para conseguir lo que uno se propone”. De ahí la importancia de invertir en la felicidad de los empleados.
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